LAS DEUDAS DE LA GENERALITAT DE MAS.
La Generalitat debe 240 millones a sus 'telecos': no les paga desde que ganaron el concurso
El presidente de la Generalitat, Artur Mas
La Generalitat sacó a concurso sus servicios de telecomunicaciones. Fue el contrato del año en el sector, por valor de más de 2.000 millones, que se otorgó en agosto del 2012. Pero los ganadores han dado con su gozo en un pozo. El gobierno catalán no está pagando a sus nuevos proveedores. Desde que consiguieron el contrato, la Generalitat les adeuda más de 240 millones de euros, según han explicado fuentes del sector de telecomunicaciones en Cataluña.
Esta cifra incluye los vencimientos a finales de abril, cuyo pago puntual ya se da por perdido entre estos proveedores. Hasta ahora, las empresas ganadoras sólo han cobrado 11 millones de euros entre todas. Portavoces de las empresas afectadas no han querido hacer declaraciones. Pero lo cierto es que en el sector, dados los graves problemas de caja de la Generalitat, la única esperanza que tienen es poder beneficiarse del nuevo programa de pago a proveedores de las CCAA, en el que está trabajando el Ministerio de Hacienda.
Entre las empresas perjudicadas están los principales ganadores de esta externalización. En total, el concurso sumaba 2.023 millones. De esta partida, Telefónica, en diversos tramos, se llevó 640 millones, seguida de T-Systems, que consiguió por diversos conceptos un total de 421 millones repartidos en siete contratos. Ahora, estos teóricos ganadores hace medio año son los actuales perjudicados, ya que están dando el servicio a la Generalitat y cumpliendo las condiciones del concurso, pero no cobran.
El grueso del sector de telecomunicaciones español está dando un servicio en Cataluña pero que no sabe cuándo lo va a cobrar
El principal acreedor es la multinacional alemana de informática T-Systems, a la que se le deben más de 60 millones de euros. Le sigue Telefónica, que acumula más de 54 millones impagados. Es decir, entre estas dos compañías acumulan el 47% de los pagos aplazados.
Otros perjudicados
El problema no se limita a estas dos multinacionales, sino que se extiende en mayor o menor medida al grueso del sector de telecomunicaciones español, que está dando un servicio en Cataluña pero que no sabe cuándo lo va a cobrar. Entre la lista de perjudicados se encuentran Abertis, con más de 30 millones; Indra, más de 8 ; la consultora Everis, con más de 5 millones o Informática El Corte Inglés, con más de 6.
Además, hay uniones temporales de empresas en las que forman parte diversos grupos y también pequeños proveedores. HP, IBM y Fujitsu también están pendientes de cobro, pero por cuantías menores a las antes mencionadas. Por ejemplo, a un grupo de pequeñas firmas catalanas a las que se dio entrada para dar apoyo al sector local ahora se les mantienen pagos atrasados por valor de más de 30 millones.
Deudas generalizadas
Con los graves problemas de caja de la Generalitat y el presupuesto congelado, las telecomunicaciones no son una prioridad para el Gobierno que preside Artur Mas. El responsable de la deuda con las operadoras es Felip Puig, el nuevo conseller de Empresa y Ocupación, que tiene las competencias sobre telecomunicaciones. Pero con la prórroga presupuestaria la cruda realidad es que Puig tiene las manos atadas.
Sólo a las farmacias y al sector sanitario concertado la Generalitat les adeuda este año un total de 900 millones de euros. Los compromisos con los geriátricos superan los 30 millones. En el actual contexto de crisis, la Generalitat da prioridad a los compromisos en gasto social y las empresas proveedoras de servicios, como las telecos, no suponen una urgencia.
Esta cifra incluye los vencimientos a finales de abril, cuyo pago puntual ya se da por perdido entre estos proveedores. Hasta ahora, las empresas ganadoras sólo han cobrado 11 millones de euros entre todas. Portavoces de las empresas afectadas no han querido hacer declaraciones. Pero lo cierto es que en el sector, dados los graves problemas de caja de la Generalitat, la única esperanza que tienen es poder beneficiarse del nuevo programa de pago a proveedores de las CCAA, en el que está trabajando el Ministerio de Hacienda.
Entre las empresas perjudicadas están los principales ganadores de esta externalización. En total, el concurso sumaba 2.023 millones. De esta partida, Telefónica, en diversos tramos, se llevó 640 millones, seguida de T-Systems, que consiguió por diversos conceptos un total de 421 millones repartidos en siete contratos. Ahora, estos teóricos ganadores hace medio año son los actuales perjudicados, ya que están dando el servicio a la Generalitat y cumpliendo las condiciones del concurso, pero no cobran.
El grueso del sector de telecomunicaciones español está dando un servicio en Cataluña pero que no sabe cuándo lo va a cobrarEl principal acreedor es la multinacional alemana de informática T-Systems, a la que se le deben más de 60 millones de euros. Le sigue Telefónica, que acumula más de 54 millones impagados. Es decir, entre estas dos compañías acumulan el 47% de los pagos aplazados.Otros perjudicados
El problema no se limita a estas dos multinacionales, sino que se extiende en mayor o menor medida al grueso del sector de telecomunicaciones español, que está dando un servicio en Cataluña pero que no sabe cuándo lo va a cobrar. Entre la lista de perjudicados se encuentran Abertis, con más de 30 millones; Indra, más de 8 ; la consultora Everis, con más de 5 millones o Informática El Corte Inglés, con más de 6.
Además, hay uniones temporales de empresas en las que forman parte diversos grupos y también pequeños proveedores. HP, IBM y Fujitsu también están pendientes de cobro, pero por cuantías menores a las antes mencionadas. Por ejemplo, a un grupo de pequeñas firmas catalanas a las que se dio entrada para dar apoyo al sector local ahora se les mantienen pagos atrasados por valor de más de 30 millones.
Deudas generalizadas
Con los graves problemas de caja de la Generalitat y el presupuesto congelado, las telecomunicaciones no son una prioridad para el Gobierno que preside Artur Mas. El responsable de la deuda con las operadoras es Felip Puig, el nuevo conseller de Empresa y Ocupación, que tiene las competencias sobre telecomunicaciones. Pero con la prórroga presupuestaria la cruda realidad es que Puig tiene las manos atadas.
Sólo a las farmacias y al sector sanitario concertado la Generalitat les adeuda este año un total de 900 millones de euros. Los compromisos con los geriátricos superan los 30 millones. En el actual contexto de crisis, la Generalitat da prioridad a los compromisos en gasto social y las empresas proveedoras de servicios, como las telecos, no suponen una urgencia.
