ORIOL PUJOL SE SENTARÁ EN EL BANQUILLO.
La UDEF dice que Oriol Pujol estaba al tanto de las facturas falsas de su mujer.
Pero además, ese mismo día –explica la Policía– ante la falta de concreción de Alsina, Oriol Pujol «insiste para solventar este problema» a través del siguientes mensajes de texto. «Sergi, te he enviado eso esta mañana, por favor...Sergi. Mañana me tendrías que decir donde factura Anna las cuatro facturas de trabajo hecho en noviembre y diciembre. La puedes llamar tu, por favor y lo aclarais...gracias».
Al día siguiente la esposa del político nacionalista se pone en contacto con Sergio Alsina, «con el fin de enviarle a ésta el nombre de dos sociedades y que entre ellas se puede repartir la facturación». Además, destaca la UDEF en su resumen de la conversación, que Anna expone que «había consignado toda la facturación a la sociedad de Alsina (Alta Partners), pero que su marido le dijo que creía que no se debía hacer así» para posteriormente pedirle a Alsina que le diga «el concepto general de las facturas» a lo que éste responde que variara dependiendo de la empresa.
Y es que la UDEF considera, como también lo hizo la magistrada del Juzgado de Instrucción número 9 de Barcelona, Silvia López Mejía, que Alsina y Anna Vidal «creaban facturas bajo pedido para justificar una supuesta transferencia de fondos en base a unos trabajos realizados mediante la utilización de distintas entidades societarias eludiendo la concentración, excluyendo a la principal Alta Partners».
Sobre este asunto, la UDEF señala en su informe del 14 de diciembre que dos nuevas conversaciones entre ambos reflejan este presunto ilícito. La primera, del 3 de febrero de 2011, Alsina le dice a Anna que «le ha de hacer otra factura de 5.000 euros» a lo que ésta contesta que «la puede hacer el lunes después de que hablen». Y la segunda, cuatro día después, en la que Alsina apremia a Anna a que le mande la factura porque la necesita de forma «urgente».