80.000 CASTELLANO MANCHEGOS DEJARÁN DE TRIBUTAR CON LA NUEVA REFORMA FISCAL.

80.000 castellano-manchegos dejarán de tributar con la nueva reforma fiscal

 La nueva reforma fiscal, que actualmente se tramita en el Senado y entrará en vigor el próximo 1 de enero, tendrá efectos directos para 79.200 castellano-manchegos, 9.000 de ellos conquenses, que dejarán de pagar impuestos, según explicaba ayer en Cuenca el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre.
En declaraciones a la prensa tras su intervención en el IX Foro Empresarial de CEOE-Cepyme Cuenca, Ferre añadía que, de esta forma, los empresarios «tendrán mayor capacidad para tomar decisiones de consumo, ahorro o inversión», lo que ayudará, señalaba, «a generar crecimiento económico».
Se trata, adelantaba, «de un elemento muy importante para este Gobierno», una reforma, afirmaba, «estructural fundamental e importantísima, que debe ayudar a ese crecimiento económico».
Un conjunto de medidas por las que, subrayaba, «los mileuristas dejarán de pagar impuestos, con independencia de la situación» como consecuencia de la bajada media del 12,5% de la tarifa del IRPF, que estará centrada en las rentas medias y bajas.
El secretario de Estado recalcaba también las mejoras incluidas en la reforma fiscal para los autónomos, entre ellas la reducción de las retenciones. Los que cuentan con ingresos inferiores a 15.000 euros se benefician ya de una reducción del tipo de retención, del 21% al 15%, gracias al adelanto de la medida, operativa desde julio. El resto del colectivo dispondrá también de una rebaja, del 21% al 20%, en 2015, y al 19%, en 2016.
Se trata, aseveraba, de «cambios que potenciarán la capitalización de las empresas y su competitividad, especialmente en las pymes», y que pondrán en manos de los contribuyentes 9.000 millones de euros, suponiendo además un crecimiento adicional del PIB de 0,55 puntos.
El secretario de Estado de Hacienda incidía en la rebaja incluida en el Impuesto sobre Sociedades y las mejoras para favorecer la competitividad empresarial y ha detallado que, con el fin de consolidar la aproximación de la fiscalidad de las empresas a los países del entorno, el tipo de gravamen general se reducirá del 30 al 28% en 2015 y al 25% en 2016.
El nuevo Impuesto sobre Sociedades, ha destacado, ofrece también una reordenación de deducciones, manteniendo las de por creación de empleo y potenciando la de I+D+i.

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