2014, UN ANTES Y UN DESPUÉS EN LA ECONOMÍA ESPAÑOLA.
2014, un antes y un después en la economía española
Este año ha sido el del comienzo del crecimiento, la creación de empleo y la recuperación de la solvencia de España
«Este 2014 marca un antes y un después. Por primera vez desde 2007 se ha creado empleo neto en España». Así resumía el pasado viernes el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, los doce meses que acaban, un año de transición hacia un año mejor. «2015 será mucho mejor que el anterior. Será el año del despegue definitivo de nuestra economía», aseguró el jefe del Ejecutivo.
2014 se despide con la intensidad con la que empezó. Los últimos datos permiten asegurar que la economía española ya ha comenzado a crecer, está creando empleo y el paro está en la pista de descenso. En el segundo y tercer trimestre se han creado 550.000 empleos, según la EPA, y el número de afiliados a la Seguridad ha aumentado en 338.000 personas mientras el paro ha caído en 300.000. Todo acompañado de mayor crecimiento. El año cerrará con un crecimiento en torno al 1,3%, el 1,4% en el mejor de los escenarios, con la previsión de que el PIB aumente el año próximo por encima del 2,5%, según coinciden analistas, servicios de estudios y organismos internacionales.
Durante el ejercicio que acaba, España ha logrado recuperar la solvencia perdida, que la prima de riesgo camine inexorablemente hacia los cien puntos básicos, desde los más de 600 que llegó a estar en los peores momentos de la crisis, recuperar los índices de producción industrial perdidos y el vigor de las exportaciones, convertidas en el motor del crecimiento futuro. Una trayectoria ayudada por factores externos que van a favorecer que la economía española siga encarrilando la recuperación, y que pasan por los mercados de materias primas y divisas. Los precios del petróleo han llegado a acumular un desplome superior al 25%, hasta los 65 dólares, lo que puede llegar a sumar medio punto al crecimiento económico. España ha pasado de ser la oveja negra de Europa a la «nueva Alemania». El ejemplo a seguir por economías díscolas como Francia e Italia, ahora los enfermos de Europa, reacios a emprender el camino de las reformas que España ya ha recorrido.
2014 ya está en tiempo de descuento, el año acaba también con una banca saneada, que comienza a dar crédito después de que el escenario haya cambiado por completo. La banca está ahora en una situación completamente diferente. Se han despejado las dudas sobre la solvencia de las entidades financieras, que era la percepción que hace dos años arrastraba a España «a una necesidad de rescate completo», según palabras del ministro de Economía, Luis de Guindos.
El año concluye con la vista puesta de los inversores en nuestro país, con suculentos proyectos y un entorno de baja inflación que permirá ganancias del poder adquisitivo a las pensiones y sueldos más bajos. El problema sigue estándo en el desempleo: 4,5 millones de parados esperan su turno.