EL AYUNTAMIENTO SOCIALISTA DE TOLEDO NO CONCEDE LICENCIA PARA REINICIAR LAS OBRAS DEL NUEVO HOSPITAL.

La solicitud de licencia para reiniciar el nuevo hospital cumple un año

La empresa constructora pidió tres autorizaciones distintas los días 13, 24 y 25 de marzo de 2015 que Urbanismo se negó a tramitar por separado pero una año más tarde tampoco ha dado con la clave para autorizarlas globalmente

La solicitud de licencia para realizar trabajos «previos» al reinicio de la construcción del nuevo hospital de Toledo acaba de celebrar su primer cumpleaños (24 de marzo) sin que el Ayuntamiento haya autorizado al Sescam la entrada de las máquinas ni antes, cuando gobernaba el PP, ni ahora, que lo hace el PSOE. Durante todo este tiempo al departamento municipal de Urbanismo no le convencen la presentación de solicitudes parciales, los defectos que detecta en el proyecto básico, las dudas sobre la dirección de obra, la carencia del informe de movilidad y la tardanza del proyecto de ejecución definitivo. Esencialmente, estos han sido los motivos alegados para que unos trámites que debían durar dos meses estén tardando seis veces más, y lo que queda.
El expediente contiene un intercambio de comunicaciones entre Urbanismo y la empresa ‘Nuevo Hospital de Toledo SA’ que viene a confirmar lo que ya se conocía, es decir, la insatisfacción de ambas partes con el comportamiento de la otra. Una especie de diálogo de sordos con alguna nota que en otras circunstancias podría resultar hasta divertida.
Por ejemplo, cuando el Ayuntamiento reclama «la regularización de ocupación de la vía pública» la empresa requiere que les «aclaren exactamente a qué está referido dicho punto ya que no tenemos constancia del mismo».
El carteo entre los interlocutores comienza el 13 de marzo de 2015 cuando Nuevo Hospital pide licencia de obra menor para la implantación de instalaciones provisionales (la famosa caseta del perro que decían los concejales socialistas). Nueve días más tarde, el 24 de marzo, presenta otra solicitud, esta vez de obra mayor, para realizar «actuaciones previas» que se acompaña del pago de las tasas y el proyecto (valorado en casi 2 millones). Un día después presentan el proyecto básico solicitando licencia «para la realización de las principales obras del contrato de la concesión» (128,5 millones de euros).

Problemas. El Ayuntamiento contesta un mes más tarde, el 24 de abril, que las tres peticiones forman  parte de una «obra única» así que va a tramitar todas a la vez y lo justifica porque Nuevo Hospital incluye el coste de las obras previas en el presupuesto del proyecto global. Descarta por la tanto dar las licencias parciales para trabajos menores (caseta de perro y demoliciones) a la vez que pide que se subsanen algunos defectos.
La consecuencia es que Nuevo Hospital considera interrumpido el computo del plazo de dos meses que según su contrato tiene para la redacción del proyecto de ejecución ya que en ese intervalo debería acometer los trabajos previos «cuya realización ha sido paralizada a resultas de haber sido acumulado el expediente hacen imposible su inicio por causas no atribuibles a la concesionaria». El círculo vicioso.
En cuanto al proyecto de construcción del hospital Urbanismo advierte que hay defectos en los baños para minusválidos, el helipuerto, planos de medidas contra incendios, zonas de evacuación de aparcamientos y ventilación, sentidos de la circulación... También avisa que la antigua dirección de obra amenaza con emprender acciones legales si se otorga la licencia «por vulneración de los derechos de autor». Nuevo Hospital revisa todos los problemas, subsana y contesta al Ayuntamiento, y aquí acaba el expediente, con la obra parada.